Estos rollitos son de una simpleza y de un sabor inigualables. Es espectacular como todo queda rico con queso (dice una francesa). Pero lo que hace esta receta especial es la combinación del queso cabra con la miel y la menta: resulta en una explosión de sabores. La miel carameliza un poco al horno, la menta infusa su sabor en la miel y el queso, y el crocante de la masa filo contrasta perfectamente con lo cremoso del queso derretido. ¡Un efecto «wow» asegurado!
Como tengo poco espacio en mi cocina hice los rollitos uno a uno. Algo importante es mantener la mantequilla caliente (sin quemarla!) mientras untan la masa porque sino se vuelve a solidificar y queda pegada a la brocha en vez de untarse.
El día que preparé la receta se fueron todos los rollitos antes que les pueda sacar fotos! Así que tuve que volver a hacer y pelear para que me dejen sacar las fotos. Ya no tenía menta así que los hice con orégano fresco. Es rico también pero sin duda queda mucho mejor con menta.
Ingredientes:
(para 8 rollitos)
- Masa filo
- 200 grs de queso cabra
- 125 grs de mantequilla
- 8 cucharadas de miel
- 1 ramo de menta
Receta:
- Pre-calentar el horno a 160°C
- Cortar 8 rectángulos de masa filo de aproximadamente 20 cms de largo
- Derretir la mantequilla y untar un lado de cada hoja de masa con una brocha
- Cortar el queso cabra de manera a obtener 8 bandas
- A una extremidad del rectángulo, untar una cucharada de miel por hoja
- Lavar las hojas de menta y pegarlas en la miel para cubrir toda la banda
- Colocar una banda de queso cabra sobre la miel y la menta
- Enrollar el queso cabra dentro del resto de la hoja
- Untar los rollos obtenidos con mantequilla
- Colocar en una bandeja cubierta con papel mantequilla
- Hornear durante 12 a 15 minutos
- Servir caliente
Lo pueden servir de entrada con un poco de lechuga o como bocadito en un cóctel por ejemplo.
Bon appétit :)